lunes, 15 de julio de 2013

¿En qué nos estamos convirtiendo?

 La sociedad se desdibuja tras una exigencia de perfección. Para ser exitoso hay que ser flaco y lindo. Esos son los modelos que nos trae la televisión. Cirugías que dejan el rostro como una máscara detenida en el tiempo, un rictus que a ellos mismos les parece hermoso, y quien lo ve desde afuera mira horrorizado un monstruo con sonrisa.
Cada vez son más y más los jóvenes anoréxicos y bulímicos. Sin dejar de mencionar una nueva moda: las niñas adolescentes que se autoflagelan, tajeándose la piel. Según la psicologa Pilar Sordo : "El problema de fondo no son los cortes, sino que las niñas no están hablando, no están expresando nada. No se sienten vistas ni siquiera por su familia y la única forma que tienen de sacar sus emociones es a través de este sistema autodestructivo”.
Dejemos de mirar para otro lado, digamos BASTA a esta exigencia de verse como modelos de televisión.
Las redes sociales nos inundan con publicidades de lifting, lipoaspiración, botox, y no se cuántas cosas más...

Una mujer no deja de ser hermosa por tener arrugas, ni una adolescente por tener algún kilo de más. Se pierden de vista los valores, están totalmente desproporcionados. Si no paramos esto a tiempo, si no miramos hacia adentro con ojo critíco corremos el riesgo de perder lo más preciado que tenemos: nuestra propia vida.

lunes, 8 de julio de 2013

Aborto prohibido


La vida de Belén, de tan sólo once años de edad,  ha sido una pesadilla desde los últimos dos, exactamente desde que la pareja de su  mamá la violó, una y otra vez. Si esto no fuera poco Belen está embarazada de 14 semanas y ha pedido a las autoridades de su país, Chile, abortar , lo que le fue negado.
El padrastro está detenido y admitió los hechos que se le imputan.
Además los médicos afirman que proseguir con el embarazo pone en serio riesgo la vida de Belén.
Muchos son los que apoyan a Belén y han salido a la calle a manifestar a favor del aborto.
La ley en la que se basan para negar este pedido es de 1973. Una ley que tiene 40 años, en ese lapso el mundo ha evolucionado, o eso creía.